Si yo estoy malo...

Fue acabar de escribir y recibir una llamada, alertándome que venía a casa a por unas cosas y luego pa dar una vuelta pro ay, el plan estaba bien encima compre cervecillas para festejar el ascenso ese que me dijeron, cuando a la hora o así recibo otra llamada mientras que estaba en la ducha diciéndome que mejor me vaya al norte que estaba con unos amigos para echar una partidilla de póker, no se jugar pero bueno la idea de salir de kasa un ratejo me apetecía aunque el clima lo ponía difícil con esos torrentes de lluvia que no cesaban quien diría que estamos en verano. Bueno al llegar y tal ya iba yo algo cargado ya que en casa empecé solo, allí mirando como jugaban al póker iba aprendiendo pa la siguiente vez no kedarme fuera y jugarme lo pokillo que gano con el aliciente de sacar el dinero a los demás. Antes de las 12 tenía que estar en casa como cenicienta, dado a que el metro a las 23:30 sale el último tren y no sabía volver en bus y no me apetecía que ya andaba mareado jaja, pos na al llegar a casa había una pequeña party, me abrí una cervecilla y me puse a hablar con mis dos nuevas compañeras de piso, así comentando cosillas de nosotros y demás para conocernos, desde luego las dos chicas son muy simpatikas y sobre todo la italiana que habla bastante bien el español (la otra es española) pero con un acento romano que tiene mucha gracia (me refiero a los de Italia no a los de Mérida). Allí entre cervecitas y tabaco se pasó un rato agradable que decidí acabar para irme a dormir que hoy tocaba madrugar y ya iba cargado de mas como para alargar más la noche.

Todos los días de la semana el despertador, bueno las alarmas de los 3 móviles, suenan a las 5 de la mañana y yo me levanto de la cama antes de las 5:30, hoy a las 6 de la mañana he abierto los ojos por lo cual me ha tokado ir con prisas durante todo el día porque no llegaba, asique con el café en el ascensor y una resaquilla muy simpática he ido a currar. El cansancio acumulado me corría por todo el cuerpo sin parar, los ojos se cerraban al parpadear y pasaban de volver a abrirse, las piernas iban arando el asfalto con los pies dado que no tenía ni fuerzas para levantarlos, así es que hoy he bendecido el autobús ya que he descansado un ratejo. Creía que el día iba a ser mortal de trabajo, lo ha sido he tenido mucho, pero me ha relajado ver que todos los que estábamos a las 7 de la mañana, incluido el jefe de 19 años, estábamos de resaca y algunos de empalme, así que hemos mantenido un trabajo sin presiones y relajadamente por lo menos las primeras horas del día, lo bueno ha sido la escusa mía a la pregunta de que tenía mala cara y los ojos rojos, dije que andaba malo (estornudo un pokillo pero es del frio poca cosa) sin poder dormir durante toda la noche, a lo cual todos se han reído y uno a uno han ido diciendo que a ellos les paso lo mismo jajajaja.

De vuelta ya a casa en el autobús encalomado en la segunda planta he podido ver unos coches de policía que habían parado a un coche haciéndoles bajar todos las cosas y posterior cacheo, como tenía la calle cortada he podido ser partícipe del registro y de los escotes de las policías, a veis visto cómo se las gastan aquí, no? (os dejo que me muero de sueño y me tengo k duxar)

Un abrazo a todos y hasta mañana, Iriaso.